17 febrero 2011

Sazon en la existenca

El Etéreo ritmo de gondwana marco una sinapsis en mi mente, que me traslado al pasado. Atrás en el presente se quedo en Añe ñe y caí de repente en el Mohave, escuchando platicas filosóficas sobre bares y rincones atrapados en el tiempo. Encadenado al pasado. Recuerdo sonrisas, carcajadas y alegrías que no sentí, ni fueron mías, sino de mi entorno. Me toco formar ver y crear, pero que tarde fueron respondidos. Recordando música, recordando... andando, pensando, preguntando un por que? y un cuando? Una sinfonía elemental de la que se compone nuestra existencia. Viendo amigos ir venir y pasearse alrededor. Ver Orquestarse y sonar nuestras propias operas en el concierto de la vida...

─Hey Sam... Entrale a las cheves!!─

No hay comentarios:

Publicar un comentario