Akketti entro hecho un huracan al cuarto, se paseo de un lado al otro como un lobo mientras las velas iluminaban su rostro enfurecido. Finalmente solto un bufido desdeñoso y se sento en la cama al tiempo que Adelia entraba al cuarto y se quedo parada frente a el.
─ No puedo creerlo─ dijo─ Como es que en un momento de necesidad tan duro como este, que el imbecil del senador por puro orgullo no quiera dar la orden de buscar a los licanos del sur. Bien sabe que son la fuerza de pelea mas poderosa que contamos y el muy cabron esta mas preocupado por la comida del ejercito, que se debilita con cada momento que dejamos aqui discutiendo─
─ Pero, el bien dejo en claro que hay otras opciones. Todos lo ven como salvajes y desconfiados. Ademas, esas pastillas de las que hablo harian a los guerreros casi supersoldados...─
─ NO!!!─ akketti le callo de un grito. ─NO QUIERO ESCUCHAR OTRA VEZ ESA MIERDA DE LAS PASTILLAS DEL SUPERSOLDADO!! ─ Estaba completamente fuera de si. Se habia levantado otra vez y daba vueltas a la habitacion como un leon enjaulado y sus ojos se veian bastante desorbitados. Adelia se hizo chiquita. Nunca habia visto a Akketti tan descontrolado y para ser francos, comenzaba a asustarle que ese fuera el verdadero licano.
Pareciera que el se habia dado cuenta. Sus hombros bajaron y un suspiro lo regreso a la normalidad, mientras el salon se quedaba completamente en silencio durante unos segundos.

─Adelia ─ Le dijo Akketti, con voz mas tranquila ─El senador es muy despota. Los lobos del sur son bastante idealistas y su codigo es muy estricto e inflexible. Eso si, son muy cultos, sin embargo, en el pasado èl intento engañarles para que hicieran sus propositos. Ellos por suerte se dieron cuenta, y pasaron de estar al servicio del senado a ser unos demonios desconocidos por completo del imperio. Ahora nadie sabe que tenemos a la elite de guerreros en combate cuerpo a cuerpo. Y el muy cabron, no tiene huevos para disculparse y que no peleen por el senado, sino por los mas debiles. Es por eso que esas... pastillas no son mas que acortadores de vida a cambio de energia explosiva. Van a recortar la vida de TODOS los soldados a cambio de una victoria en una batalla creyendo que con eso ganaran la guerra... Otra tanda de pastillas como esas y la vida de cada guerrero se reduce, y no pienso sacrificar a toda una generacion a cambio de la supremacia de un corrupto sistema de gobierno.─ Adelia se quedo en silencio. Akketti le sonrio tranquilamente
─¿lista para otra aventura?─
─¿Iremos a buscar a los licanos del sur?─
─¿Todavia tienes que preguntar...?
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